sábado, 30 de abril de 2011

Mensajería al gusto del político

Desde ayer se me acumula una rabia difícil de digerir porque son ya muchas cornás al oficio que más amo del mundo. Después de enterarme de que El Correo de Andalucía vuelve a hacer nuevos recortes precisamente entre algunos de sus mejores profesionales, para reducir costes, según el criterio de sus mandamases, o para terminar de hundir al decano de la prensa sevillana, según el criterio del sentido común, veo a Cospedal, de la nueva guardia agresiva del PP, menospreciando íntegramente a la directora del programa de la mañana de TVE, Ana Pastor, paradójicamente con el mismo nombre y apellido de aquella ministra de Sanidad de la era de Aznar. Digo que el menosprecio fue íntegro porque no sólo se desprendió por sus palabras de rechazo a la opinión de la periodista, sino por su tono y hasta su mirada. Un contertulio preguntó a la secretaria general de los populares qué había del ataque de su partido contra Radio Televisión Española, a lo que la susodicha dijo que la objetividad informativa en asuntos políticos de la televisión pública dejaba mucho que desear. Pastor se sintió agredida por lo que le toca y reaccionó preguntándole cuál era el modelo que ella (ellos, los populares) consideraban para poder hablar de televisión imparcial, y le añadió, como coda: "¿Canal Nou o Telemadrid, quizás?", tras lo que Cospedal perdió el hilo de su argumentación y se agarró al hilo del ataque compulsivo, sin acordarse, claro, del ce-ce-o-o de aquel Urdaci de infausto recuerdo, por ejemplo. Como acostumbra la derecha profesional de este país nuestro, la vice, Ana Mato, sale después asegurando que "nunca" en su vida ha visto "tanta manipulación en TVE como ahora".


Nunca. Será porque nunca ha sido esta cadena tan imparcial ni ha estado dirigida por profesionales tan honestos y movidos por criterios puramente periodísticos como hasta ahora, y claro, para un partido acostumbrado a mover los hilos de la televisión que consideran de su propiedad, este ejercicio de objetividad informativa les parece, evidentemente, manipulación de sus intereses. Ahí llevan razón. Eso mismo les pasa a los socialistas en otros ámbitos donde también han estado acostumbrados a mandar y si ahora o luego se hace televisión decentemente imparcial les parece manipulación. Manipulación de los intereses generales del partido, quieren decir. Pero no lo dicen; dicen "manipulación", que suena en vez de a manos que trabajan para modelar un producto -la información, por ejemplo- a "corrupción", vocablo que a los políticos en general les suena más familiar.

Los periodistas somos mensajeros y desde tiempo inmemorial se nos quiere matar. Matar al mensajero ha sido el desahogo más rápido y fácil de nuestros poderosos a lo largo de nuestra historia. Ahora se ha puesto de moda, porque la crisis y las nuevas tecnologías lo permiten, el paquete mediático que los partidos, objetivamente, producen para enviar a los medios, a quienes surten de todo: de fotos, de textos, de videos y hasta de titulares precisos. Los mensajeros sólo tienen que copiar y callar.

Cuando una periodista como Ana Pastor se atreve a intervenir, como intelectual de la sociedad que es también, dando su opinión o instando a un representante público a que se explique mejor, se convierte en una mensajera señalada, cuya cara no se les olvidará a los del PP cuando dentro de un año comiencen a mandar en España. Si este es el nivel medio de nuestra España democrática en los albores del siglo XXI, creo normal que no se me pase este cabreo de constatar que la masa, en general, sigue preocupadísima por el partido de vuelta Real Madrid-Barça. Mañana, más.

domingo, 24 de abril de 2011

Sonidos para una Vida muchísimo más larga

Manuel tiene más años de los que parece, una sonrisa escondida y una discapacidad de casi el 90%. Está en la silla como en su mundo, emitiendo sonidos que sólo sus compañeros entienden y, de repente, al ritmo del órgano, estira sus brazos, abre sus manos, mira al techo y acompasa las palmas cada vez mejor, hasta que milagrosamente lleva el son como si hubiera despertado de algún sueño olvidado. Es uno de los chicos de Aura, la asociación de discapacitados de Los Palacios y Villafranca que ha comenzado a experimentar con esta terapia basada en la música.


Manuel y sus compañeros tienen el mejor maestro posible: José Luis Carvajal, el primer palaciego que se convirtió en profesor superior de Música, dedicado a esta pasión desde su más tierna infancia y fundador de la Escuela Municipal de Música y Danza hace una década. Cada viernes, les regala una sesión de musicoterapia que los chicos esperan como agua de mayo, pues les permite comunicarse mejor que el resto de los días. "Para eso sirve la musicoterapia, que no es algo lúdico, sino terapéutico", insiste Carvajal, quien confiesa que "ellos me dan a mí más de lo que yo a ellos".

Desde luego emociona ver cómo Ana, con la cabeza gacha y el ánimo en otro sitio, desparrama una sonrisa por la habitación en cuanto el profe le dice que le toca a ella. "La canción de la pelota", le señala, y ella vuelve a sonreír, ensayando palmas. Pero no valen de cualquier manera; hay que seguir el ritmo, así que Carvajal comienza en el órgano para que ella se acompase. Una vez, dos, tres intentos, hasta que ella empieza en el mismo instante que él. Entonces Ana sigue perfectamente el ritmo, según marcan las notas, y canta, derrochando memoria para una letra que aprendió hace sólo una semana. Emociona asimismo que a Abraham, un pequeño con síndrome de Down, baste con decirle que cante un fandango para que el crío se arranque y luego se aplauda a sí mismo, entre risas del grupo. O que Macarena y Araceli estén deseando que llegue el instante del corro, para intercambiar parejas.

Emociona mucho ver al grupo de chicos sentados muy formales, expectantes por el órgano, la flauta, el tambor o la pelota. Cualquiera de estos instrumentos persigue mejorarles su capacidad expresiva y de relación con los demás, su psicomotricidad, su desarrollo sensoral y perceptivo, y desinhibirlos.

Carvajal es profesor de flauta travesera en la Escuela Municipal que él mismo fundó como director, pero está deseando que llegue cada viernes para disfrutar de los avances de sus chicos de Aura. "Tienen una memoria increíble para la música", dice, y lo confirman los padres, que asisten a las sesiones e interactúan con sus hijos, la pedagoga, la logopeda y la fisioterapeuta en la mayoría de actividades. Vistos los extraordinarios resultados de esta armoniosa terapia que se va extendiendo por todo el mundo y que en Los Palacios ha recalado ahora, Carvajal pretende hacer extensivas sus sesiones a enfermos mentales de otros ámbitos e incluso a esquizofrénicos, drogodependientes, depresivos, enfermos de Alzhéimer y personas mayores en general.

Ojalá tenga suerte.

  • Este reportaje, resumido, lo publico hoy también en El Correo de Andalucía.

sábado, 23 de abril de 2011

El Día del Libro con un libro tan cercano

No me he acordado hasta hace un rato de que hoy es el Día del Libro, 23 de abril. Sí me acordé a principios de mes y por eso organizamos en el instituto un gran recital poético el pasado día 14, conmemoración del alzamiento de nuestra II República, y acabamos todos embelesados por el cante por bulerías que nos hicieron unas niñas de Los cuatro muleros y del 'Romance sonámbulo' de Lorca con un verde que te quiero verde que nos palpitó a todos en las venas hasta el día siguiente. Como hoy es Sábado Santo y ha amanecido nublado, con nostalgia contrariada de los pasos que no han podido salir, creo que muy poca gente se habrá acordado de que tal día como hoy murieron (conveniencias de calendarios de por medio) dos grandes de las Letras como Cervantes y Shakespeare. Ni siquiera yo, tan devoto, hasta hace un rato.

Pero, no crean, he hecho el mejor homenaje al libro que cabría hacerse. Me levanté antes de las nueve y, malvestido y en busca del café mañanero ahí en la esquina, cogí uno que ya he leído y saboreado pero que ahora releo e investigo más a fondo: Relatos palaciegos, una deliciosa colección de 22 cuentos escritos por un maestro no reconocido de mi pueblo que se llama Miguel Roldán, a punto de cumplir 80 años y al que el próximo sábado haremos un homenaje para que su persona y su literatura sean imperecederos, como merecen. El libro es una joya que yo mismo jamás tuve en suficiente consideración hasta que he tenido la suerte de que Miguel me persiguiera para que le sacara un reportaje en El Correo de Andalucía sobre su tercera edición. Entonces lo leí en condiciones y lo degusté con fruición. Y ya estoy convencido de que es una obra imprescindible.

Son relatos sueltos que fueron apareciendo en números dispares de la revista El Soberao, aquella publicación romántica que editaba el Ateneo antes de que la desidia y unos cuantos inútiles terminaran de sabotearlo. Pero todos mantienen el nexo común de una época con intenso olor a jaramago en la que los niños no tenían más entretenimiento que la bella costumbre de vagabundear a lomos de su imaginación, en un micromundo minado por la crueldad franquista y la compasión que sólo la madre naturaleza, en su advocación marismeña, podía dispensar.

El sábado que viene haré todo lo posible por convencer al respetable que se congregue en El Casino de que Relatos palaciegos es una obra literaria universal y de que nuestros niños deberían leerla para que no todo, en esta sucesión de crisis interminables, termine en peligro de extinción o totalmente extiguido.


lunes, 4 de abril de 2011

Íntimas abstracciones de mi paisana Inma Fierro


Lleva el sugerente nombre de 'Veni, vidi, sensi' y, más allá de la guerra de las Galias, pretende ganar la batalla de la sensibilización hacia el expresionismo abstracto desde la tierna infancia. Por eso la exposición de esta artista palaciega que acogen al alimón la Casa de la Cultura y el bar Manhattan de Los Palacios y Vfca. (Sevilla) hasta finales de mes es también un recorrido didáctico por la pintura en general, ejemplificado en Inma Fierro, para casi medio millar de escolares de entre 7 y 10 años que completarán un itinerario repleto de brochazos.

Inma Fierro, palaciega de 26 años y hecha artista de brega en la Universidad de Barcelona, donde se licenció (aunque empezó en la de Sevilla) y en los museos y galerías de media Europa, ha organizado una original exposición pictórica en su pueblo que no cabe en la Casa de la Cultura. Por eso su última producción se expande por un céntrico bar de la Plaza de España, lo que supone el remate de un itinerario didáctico que comienza en sus primeros dibujos, los que ella misma hacía en la escuela, y termina en sus últimas propuestas de la abstracción más íntima.

El recorrido es, en rigor, una ilustración inversa para combatir ese impertinente tópico que a Fierro molesta tanto, aquello de que cualquiera le diga: "Eso también lo pinto yo". La muestra, con media centenar de obras, incluye aquellos bocetos suyos de cuando no se salía al colorear, de cuando la maestra llamaba asombrada a su mamá, y termina en propuestas que por sí mismas no engancharían con la mayoría de los espectadores. "Por eso decidí hacer un recorrido por toda mi trayectoria", dice riendo, sobrepasada por su la conciencia de ser tan joven, "¿y qué trayectoria voy a tener yo que estoy empezando?". En realidad, sólo así pequeños y mayores podrán comprender el proceso artístico de ella y de todos los grandes (Goya, Picasso, Kline están entre sus maestros) por el que se persigue que la pintura no represente la realidad en sí, fotográficamente, sino lo que la realidad y su devenir producen en la sensibilidad más profunda del pintor. El itinerario hacia la modernidad.

La exposición de Fierro incluye marinas, bodegones, paisajes urbanos y copias de los clásicos como las Venus de Boticelli, pero enseguida avanza hacia sus Venus transformadas, mutiladas, endemoniadas, personalizadas al fin y al cabo. Y en esa senda hacia la abstracción continúa por la esencia de la muestra, que son sus pies y manos en grandes formatos. "Los pies y las manos son muy significativos para mí porque tienen que ver con el contacto, los saludos, las despedidas, el sexo de los pies entrelazados...".

Casi 500 niños de 3º a 5º de Primaria irán pasando por la muestra en grupos reducidos que contarán con explicaciones precisas de la autora y de la crítica de arte y museóloga Victoria Baquero. Verán un video del proceso creativo, mirarán los cuadros, preguntarán, expresarán lo que les sugieren y escucharán posibles interpretaciones. Todo ello para empaparse de arte y contar a la postre que llegaron, vieron y sintieron.

  • Este texto, resumido, lo publico también hoy en El Correo de Andalucía